jueves, 3 de febrero de 2011

SOLEDAD



SOLEDAD

Soledad, compañera, siempre a mi lado estas;
-¿Por qué no me abandonas? ¿Por qué tú no te vas? 
Si todos ya se han ido, si nadie espera ya: 
-¿Qué esperas para irte dejándome la paz? 

-¿Por qué estas a mi lado, mostrando mi vacío? 
Sobre este cuerpo mío: -¿Qué pretendes probar? 
No enmarques mi tristeza ni mis hombros vencidos, 
Deja que entre los muchos pueda ser otro más. 

 No quiero que me muestres haciendo que me miren. 
Si tú me dejas solo, dejaré de brillar. 
Morirán mis luciérnagas, se apagará mi vida, 
Me mezclaré en un grupo y nadie me verá. 

Llevándote a mi zaga, mi sombra crece y crece, 
El ruido de mis pasos parece retumbar. 
Embarga mi figura un halo de misterios 
Y todos se preguntan: -¿Por qué tan solo va? 

Ya sé que cuando partas algo se ha de quebrar: 
No será igual la lluvia, ni la noche, ni el mar. 
No tendrán mis silencios tu cálido sonido, 
No tendrán mis sentidos tu fuerza secular. 

Pero quiero estar SOLO, por eso necesito 
Mezclarme entre la gente, rodearme de bullicio, 
empujar mis sentidos a un hondo precipicio 
Donde ni tú me esperes, ¡Querida soledad!

Pedro Lapido Estran. 

De su libro “Mis Gnomos” – 1983 – Biblioteca Nacional. 

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Arca Blanca

Arca Blanca
¡ Atrévete a volar!